VENCEREMOS

2015, escultura en fibra de vidrio.

 

Un hecho importante que sostiene la obra, es la historia del arte en Chile, la cual es está marcada por una imitación burguesa de estereotipos foráneos, donde continuamente se importa el lenguaje del arte contemporáneo sin identidad propia. A la vez, se instala una forma de representación diferenciada, cuyos polos son las élites, con un consumo de arte de vanguardia, y el pueblo, con una cultura de masas predeterminada por los valores de la sociedad norteamericana y sus modas televisivas.

 

Finalmente, Venceremos, invita a la reflexión. Ya que la televisión, fue y continua siendo un instrumento eficaz del aparato de dominación, en el cual los procesos de asimilación cultural de la sociedad chilena son evidentes, por ejemplo, a la hora de proponer la idea de un heroísmo mágico anclado en la tecnología, y desarticulado del contexto histórico particular, y las convicciones populares que tras la dictadura quedan ocultas tras el predominio de la cultura de masas.